miércoles, 18 de abril de 2012

Su patria no es mi pueblo


Decía Don Antonio Machado que "en España, lo mejor es el pueblo. Siempre ha sido lo mismo. En los trances duros, los señoritos invocan a la patria y la venden; el pueblo no la nombra siquiera, pero la compra con su sangre".

Los máximos representantes de la que llaman "nuestra patria", en estos días hunden su reputación en la más hedionda corrupción aprovechándose del nombre que el pueblo les ha concedido. Pero la riqueza nunca sacia a la riqueza. La patria sólo es el trapo tras el que se esconden.

Son estos, tiempos difíciles en los que, por ello, les debiera ser fácil demostrar su amor a la patria y no doblegarse cobardemente a los dictados de otras naciones para acabar aniquilando todos los servicios básicos del Estado, que son los que cohesionan esa patria porque protegen a sus súbditos más débiles. Muchos de ellos confiaron en vosotros para que les defendierais. Sin embargo ahora huis pidiendo se os indique dónde está la puerta falsa de la casa en la que decís representarnos y que apenas conocéis.

Esos súbditos llevan la patria a sus espaldas y la reflejan en su cara sin invocarla y sin necesidad de amarla, sin creer que por ella se deba luchar porque, cualquier dogma, como las religiones, brilla pero no ilumina, que diría Schopenhauer.
En las etiquetas de este artículo incluiré las palabras, Argentina, Repsol, IPF y patria, Urdangarín, Elefante y Burla.

1 comentario:

ATELIER SCIENTIFIQUE dijo...

Te pillé. Coincidencia absoluta. ¿Qué decir? Me arriesgaré a citar de memoria una frase de película. Senderos de Gloria de Stanley Kubrick, como sabes prohibida en España por su alegato antibelicista. Una de sus perlas, que debía dolerle al generalísimo decía algo asi como que los dictadores hablaban de patria solo cuando pensaban pedirle al pueblo sacrificarse por ella.